Amnistia

 “Pedir una amnistía como la del 77 es estar fuera de la realidad”. Afirmación de hace un par de días de Joseba Azkárraga, abogado, y que acabo de leer hoy 11 por la noche. Señalo lo de abogado como hombre conocedor de leyes. Pero ésta no es una cuestión que se deba analizar desde una perspectiva jurídica sino política, pues no estamos hablando de violadores, de corruptos, de la banca que pagamos todos y excluye, engaña y roba a los que más lo necesitan. No. Estamos hablando de presos políticos vascos (PPV) donde el término político es el núcleo de la cuestión y no una de las últimas capas de la cebolla.

Efectivamente no se reclama una amnistía como la de 1977 porque no fue tal, por dos razones poderosas. La primera razón es que no pasadas unas cuantas semanas de las excarcelaciones, volvía a haber presos políticos vascos a causa de la misma lucha de liberación nacional y social. Así que para los presos políticos que salieron en libertad (por cierto que algunos Grapo no salieron) fueron indultos, en todo caso.

La segunda razón es que, en este caso, sí hubo amnistía para el régimen de la dictadura, para el régimen de Franco y toda la oligarquía y señores y señoras poderosas que, con total impunidad, hicieron lo que quisieron a nivel político, represivo, económico, etc.

Ningún crimen de los miles cometidos por los fascistas fue juzgado ni resarcido. Cientos de miles de expropiaciones jamás fueron devueltas. Quizá algunas de los sindicatos para que comenzaran a pasar por el aro como así han intentado hacer lo mejor que han podido, con mayor o peor suerte.

No queremos esa amnistía. Queremos la AMNISTIA TOTAL. En sus dos aspectos. Libertad inmediata de todos los presos, deportados y exiliados políticos vascos sin excepción. Es la exigencia a nivel táctico que no puede tener negociación ni rebaja. A nivel estratégico es, sencillamente, que desaparezcan las causas por las cuales lucharon y fueron encarcelados. Es decir el derecho de Euskal Herria a un futuro libre y socialista.

Uno se pregunta a cuenta de qué solamente hay que reclamar derechos humanitarios (entendidos como derecho del enemigo) o, como mucho, una actuación de los Estados español y francés acorde con la decisión de ETA de dejar definitivamente la lucha armada y la entrega de sus arsenales.

Efectivamente el derecho penitenciario español y francés aplicado a los presos políticos vascos en la letra y en la práctica resulta un derecho penal y penitenciario del enemigo. Y reclamar esa legalidad es reclamar la ley del enemigo. Lo mismo cuando se reclama, o se da por aceptable, su democracia.

A estas alturas debiera ser una barbaridad no reconocer que se está torturando a los PPV y a sus allegados. Que la situación de aislamiento es conocida como tortura blanca. Que el no reconocimiento de su carácter político, y una vez de estar encarcelados, es el peor delito que los Estados francés y español cometen política y éticamente contra sus enemigos, los luchadores por la libertad y el socialismo para Euskal Herria. Que dispersarlos y separarlos entre sí, es un castigo cada hora que pasa, para ellos y sus familias. Que no liberar automáticamente a las personas de avanzada edad es una mezquindad. Que no pongan en libertad a los presos gravemente enfermos en el minuto cero del diagnóstico médico, es la más perversa acción contra un ser humano, máximo para cuando su excarcelación se le pide que renuncie a su carácter político, a su militancia, que no sea solidario, que se arrepienta, etc.

Ante todo eso, se pide que se les acerque a Euskal Herria. No se meten en cuestiones políticas (¿para ser más eficaz?) En pocos años, no teniendo la sociedad vasca otra referencia visible (la del Movimiento por la Amnistia y contra la represión es ocultada, cuando menos) han conseguido que miles de personas reclamen que se cumpla la legislación del enemigo, la ley política, penal y penitenciaria del enemigo. Algunos como Joseba Azcárraga, están cumpliendo el papel de luchadores, facilitadores y militantes por una causa que no existe. Por esa causa no han luchado los PPV ni decenas de miles de militantes y ciudadanos de a pie que nunca han sido encarcelados. Hay que subrayar que los PPV no son extraterrestres. Sienten como miles de vascos. Somos iguales a la hora de luchar.

Por qué alguien se empeña en separarlos de nosotros. Por qué es/son un problema. Por qué Sortu dice que es más que viable (o antes incluso si la sociedad vasca lo desea) la independencia para dentro d e menos de 10 años y somos incapaces de sacar de la cárcel a los que más han dado.

Los de Sare dicen que no es realista demandar la AMNISTIA. Los de Sortu ofrecen el sálvese quien pueda dentro de los que puedan y los que el enemigo quiera… y un brindis por los que no podrán salir hasta pasados 10 años o 20 (o más) de la independencia. Los que denunciamos esto, no estamos chalaos. Esa es la que hay.

Otro dicho de Joseba Azcárraga cuatro días antes de la manifestación convocada por Sare el 14 en Bilbo. “Confiamos en que ésta sea nuestra última movilización porque 2017 tiene que ser el año del desbloqueo”. Breve currículo conocido de Joseba Azcárraga: apoyo a vías de arrepentimiento en su época de abogado, Consejero de Justicia del Gobierno Vascongado cuando se torturaba a militantes vascos en Arkaute, facilitador de una causa que no existe salvo en el campo del enemigo. En el campo del enemigo o intentando desvirtuar el carácter político de la lucha y de sus militantes. Esa dinámica entra en los parámetros del enemigo desvirtuando la de los que se pretende ayudar.

Es como cuando, en la Audiencia Nacional española, los encausados en el caso Segura aceptan las tesis del enemigo para no ir a la cárcel, pretendiendo que todo se dé por aceptable para no ingresar en la misma. Y recomendando esa “jugarreta” a todo el que pase por el mismo cuartel de excepción madrileño. Como si la lucha fuera buscarse la vida, un cuento, cuestión de “listos” o de “políticos”.

Esto recuerda a la coletilla de “…juzgados por cuestiones políticas”. Entonces ¿cómo se les debe conocer a los juzgados por causas que tienen que ver con ETA? Recordaros que el 14, sábado, en Bilbao, desde la plaza de los hermanos Etxebarrieta (antigua plaza de Unamuno) a las 20.00 horas, saldrá una manifestación pro AMNISTIA que recorrerá las calles del Casco Viejo bilbaíno. Solo con la movilización podremos sacarlos como lo que son, militantes políticos por la liberación nacional y social de Euskal Herria.