JARDUN ha bloqueado el puente entre Irun y Hendaia este 1 de mayo


Hoy, 1 de mayo, varios miembros de la coordinadora JARDUN han cortado el puente que une Irun y Hendaia a raíz del Día del Trabajador. Una vez en el puente han leído un comunicado denunciando las fronteras y divisiones que los estados francés y español imponen al Pueblo Trabajador Vasco.
Según la coordinadora este puente representa perfectamente “el afán de los Estados por imponer fronteras y promover divisiones”, ya que esta “frontera artificial evita una Euskal Herria unificada y nos separa a los trabajadores de Iparralde y Hego Euskal Herria”. Seguidamente, haciendo referencia a esta frontera, han afirmado que busca “tanto negar la condición de nación de Euskal Herria como anular la conciencia nacional”. Pero han destacado que esas no son la única función de las fronteras, ya que también son “mecanismos para violentar y disciplinar a la mano de obra inmigrante”. Para la alternativa revolucionaria, las fronteras crean “una diferenciación entre autóctonos y foráneos que evita la materialización de la unidad del Pueblo Trabajador Vasco” y contribuyen a alimentar una reacción que favorece a la burguesía.
Mas tarde han hecho referencia a la Unión Europea, así como los estados francés y español que son parte de esta, afirmando que promueven “la guerra y el conflicto”. Según la coordinadora las relaciones imperialistas de dominación entre países son la fórmula que “aprovecha el capital para hacer frente a la crisis económica que atraviesa”. Y hablando de la crisis han recalcado que la burguesía ha “inventado y encarnado en los inmigrantes un enemigo a medida de sus necesidades” para mantener así los beneficios y la hegemonía que esta tiene. De esta forma, “han puesto en jaque al estrato más vulnerable de la clase trabajadora de Euskal Herria, que tiene las peores condiciones y ocupa los puestos de trabajo que nadie quiere” han denunciado.
Frente a toda esta división JARDUN ha reivindicado la unidad del Pueblo Trabajador Vasco. De esta forma han subrayado que “por encima de los límites de los estados opresores, por encima de los orígenes de los trabajadores de Euskal Herria, tanto en Iparralde como en Hegoalde, tanto autóctonos como inmigrantes, en Euskal Herria todo aquel que esté condenado a vender su fuerza de trabajo forma parte del Pueblo Trabajador Vasco”. Finalmente han afirmado que al Pueblo Trabajador Vasco le corresponde “combatir las tendencias racistas que fomentan la división, las estrategias de asimilación de los estados y la opresión nacional y las fronteras que derivadas de ella”. Igualmente también han hecho un llamamiento ha la resistencia frente los estados francés y español y la Unión Europea que “quieren condenarnos a la guerra"