El 26 que amamos, el 26 que Euskal Herria ama

Decía Carlos Puebla que siempre es 26 y así es. Para l@s comunistas abertzales vasc@s, siempre es 26.

Cuba, ocupa un rincón en nuestros corazones porque Cuba es la dignidad, Cuba es la alegría y Cuba es nuestra hermana más entrañable. Esa hermana que es maltratada por el imperio, que es asediada por todo tipo de gusaneras, las de derecha, con sus aires revanchistas y la de izquierdas, esa izquierda domesticada y servil que trata de dar lecciones a un pueblo orgulloso mientras aquí, en la Europa burguesa y capitalista hace genuflexiones a las estructuras de poder, mientras con la boca pequeña, diseña imaginarias revoluciones.

Cuba es liberación nacional, un pueblo que con mucho sudor y sacrificio lograr expulsar a los colonialistas españoles primero y a los imperialistas yanquees después. Su independencia real , una independencia no dependiente de ningún poder extranjero y ajena a las multinacionales que prácticamente han patrocinado otros procesos de liberación, es un espejo en el que l@s comunistas abertzales vasc@s nos miramos una y otra vez, con sentimientos de sana envidia.

Su socialismo, no ajeno a problemas que se resolverán dentro del socialismo, nos llena de ánimo y dice que no es imposible desarrollar una sociedad socialista en el siglo XXI y que las ideas de Marx, Lenin, Engels están cargadas de actualidad.

Patria es Humanidad, dijo hace ya muchos años Martí, y el internacionalismo que es una de las señas de identidad de Cuba, es la tercera cualidad y valor que l@s comunistas abertzales vasc@s hacemos nuestra.

Amamos Cuba, porque Cuba es liberación nacional, porque Cuba es socialismo y porque Cuba es internacionalismo.

Desde posiciones abertzales, independentistas, marxistas e internacionalistas, queremos lanzar un giño de complicidad a la Cuba mil veces rebelde y saludar este nuevo 26 de Julio.

L@s comunistas abertzales vasc@s reivindicamos la plena actualidad de la revolución cubana y manifestamos nuestro pleno apoyo a Cuba, contra todo tipo de gusaneras.

Euskal Herria, julio 2010