Marcha a Garoña

La Coordinadora contra Garoña, colectivo que agrupa a asociaciones ecologistas, sociales y políticas que exigen el cierre inmediato de la central nuclear de Garoña, convoca el próximo domingo 9 de septiembre una nueva edición de la marcha contra Garoña. La movilización partirá el domingo 9 de septiembre a las 12 horas desde Barcina del Barco, y finalizará con la lectura de un comunicado frente a la central nuclear de Santa María de Garoña.

Desde la Coordinadora contra Garoña llamamos a la sociedad a movilizarse para defender un sistema energético limpio, seguro, y sostenible basado en el ahorro y las energías renovables, en contraposición del sistema energético sucio y peligroso que defiende el Gobierno del PP y que está hecho a medida de las grandes empresas eléctricas.

El Gobierno del PP ha iniciado una regresión energética al alargar la vida de la central nuclear hermana de Fukushima, aún a costa de paralizar la instalación de las energías renovables. Esta involución energética va en dirección opuesta a la actual política energética mundial (de sustituir las energías sucias y contaminantes por energías limpias e inagotables), y también es contraria a sentir mayoritario de la población que reclama energías limpias y seguras. El gobierno del PP ha decidido imponer a la sociedad durante más años el riesgo que supone el funcionamiento de Garoña.

La decisión de revocar el cierre de Garoña está basada en dos grandes mentiras. Miente el ministro Soria al decir que la energía de Garoña es necesaria, ya que hay exceso de potencia eléctrica instalada y nos sobra electricidad, y miente también el ministro Soria al decir que la energía de Garoña es barata, ya que los consumidores la pagamos al precio más alto, y son los propietarios los que se aprovechan del inmenso margen de beneficio al producir barato y vender caro.

La verdadera razón del Gobierno de permitir prologar Garoña es continuar permitiendo que las grandes eléctricas obtengan pingues beneficios con el funcionamiento de viejas centrales amortizadas, lo que le abre las puertas a un retiro tras su etapa de gobierno como ya hicieran Felipe González en Gas Natural y Aznar en Endesa.

Desde la Coordinadora contra Garoña exigimos al Gobierno que reconsidere su decisión de permitir funcionar más años a Garoña, y que deje de supeditar el futuro del sistema eléctrico a los intereses de las grandes empresas eléctricas. Es necesario otro sistema energético basado en el ahorro y las energías renovables, y el cierre inmediato de Garoña es un paso imprescindible para caminar hacia un futuro energético limpio y sostenible.