Sabemos qué queremos, y cómo conseguirlo

En estos días se han sucedido noticias más o menos ampliadas por medios de comunicación o partes interesadas, que nos dan a entender que gran parte de las reivindicaciones y los problemas del sistema público de salud de Navarra están solucionados o en vías de solución.

Con este escrito queremos matizar, y mucho, ese aire triunfalista y colocar las cosas en el punto exacto en que a nuestro juicio se encuentran.

Es cierto que la reivindicación de liberación de la exclusividad para profesionales de la medicina ha quedado aparcada, al menos de momento. Este logro lo consideramos un éxito de las movilizaciones de la ciudadanía y del sentido común de la mayoría.

También vemos que se ha acordado establecer algunos complementos económicos que afectan a personal médico, así como a otros colectivos profesionales, y que se reconoce la existencia de desigualdades injustas entre estamentos del propio sistema. Pero al hacer ajustes retributivos, se ha dejado fuera al personal “no sanitario” de Osasunbidea. Se mantiene así la injusticia de un sistema retributivo obsoleto e incapaz de reconocer el mérito y la dedicación de sus diferentes tipos de profesionales.

Se plantean también algunos compromisos difusos sobre organización, retribuciones y contrataciones cuya garantía de resolución genera dudas.

Igualmente, se habilitan pequeños parches a las necesidades de la población y de la mayoría de profesionales del sistema público de salud (dietas desplazamientos, número de consultas en primaria…), que difícilmente solucionarán los problemas existentes.

Vemos también que existe un amplio consenso entre los grupos parlamentarios que, probablemente para evitar la protesta de la plantilla por sus condiciones de empleo y trabajo precarias, renuncian a hacer reformas de calado y apuestan por cerrar la herida en falso.

No podemos dar por buena esta situación. Nuestra coherencia y nuestra responsabilidad moral nos obliga a decir que esto no basta. Puede ser un punto y seguido, pero no es una solución para los problemas de la sanidad pública. El sistema público de salud está en peligro, y por tanto los derechos sociales de la mayoría de la sociedad navarra.

Podemos resumir como puntos centrales que no se han resuelto con los acuerdos adoptados hasta ahora los siguientes:

Dotación suficiente de presupuesto para atención primaria, para garantizar centros de salud accesibles y que las personas sean atendidas de forma estable por los mismos equipos profesionales. Reducción de las listas de espera, Reorientación y desprivatización del sistema de salud mental, Reversión de las privatizaciones como conciertos, pruebas diagnósticas, u otras. Consolidación y ampliación de las plantillas, Atención sanitaria a personas mayores desde el sistema público de salud y la desarrollo desde lo público de servicios socio sanitarios. Aprobación de una nueva ley foral de salud, que consolide y blinde el sistema público de salud.

En este momento de incertidumbre, consideramos que esas reivindicaciones continúan pendientes y que sigue siendo necesario apoyar todas las movilizaciones que apuesten por un sistema público de salud universal y de calidad.

Igualmente consideramos que, si los grupos políticos no consideran que este es el momento de adoptar medidas que garanticen el derecho a una salud pública universal y de calidad, nos van a tener hasta el final de esta legislatura y desde el minuto cero de la próxima reivindicando los cambios necesarios del sistema que en nuestras iniciativas han conseguido el refrendo de la gran mayoría de profesionales y numerosos ayuntamientos de nuestra tierra.

Es nuestro derecho y nuestra obligación moral seguir luchando en contra de los intereses de las minorías privilegiadas y en favor de una vida digna para la mayoría de nuestra gente.

Pamplona/Iruñea, 8 de marzo de 2023.

Gurutze Arregi y Lázaro Elizalde 

Plataforma Navarra de Salud/Nafarroako Osasun Plataforma