Domuit Vascones

Durante mucho tiempo se usó esta arrogante frase latina como ejemplo histórico para explicar las ansias de dominación que han ejercido imperios y diversas castas sobre el pueblo vasco. El caso es que al parecer nunca existió tal frase y en ningún documento de la época aparece escrita. Al César lo que es del César.

Claro está, algunos académicos aburridos del nacionalismo español cuando se dieron cuenta de ello, alborazados exclamaron que era una farsa eso de que el pueblo vasco haya sido independiente o atacado nunca. Que son solo “mitos” del abertzalismo.

Lo que ocurre es que si bien es cierto que el famoso “Domuit Vascones” nunca ha aparecido en ningún escrito conocido, si no quieres una taza, taza y media y si lo ha hecho por ejemplo Vasconias depraedatur (año 448), Exercitum inde alium mittit, qui captam inde Pampilonam (466), Partem Vasconiae occupat (551), Contra Romanorum insolentias et irruptiones Vasconum movit (586), Hic Vascones una expeditione vastavit (610), Contra incursus Vasconum (621), Incusante Aighynane duce, quod rebeliones wasconorum fuissente conscil (626), Totam Wasconiam cum exercitu superans (628), Wascones omnes seniores terrae illius (636), Prius feroces Vascones in finibus Cantabrie perdomuit (672), Vascones crebro rebellantes (673) …

A los vascones, que se habían rebelado, los venció y sometió (Uascones rebellantes superabit atque edomuit), La fiereza de los vascones la aplastó y la humilló por dos veces con su ejército (Uasconum feritatem bis cum exercitu suo contriuit atque humiliauit), Derrotó a los vascones (Uascones deuicit)…

Podríamos avanzar mucho en el tiempo y seguiríamos igual; “Ha caído vencida para siempre esa horrible pesadilla siniestra y atroz llamada Euskadi” como decía aquel alcalde franquista de Bilbo.

Y así podríamos seguir con ejemplos hasta que nos cansemos: Hasta que nos cansemos o hasta las últimas declaraciones del ministro de interior español. Tan últimas que llevan siglos con ellas.

Si me hubieran dado un euro cada vez que alguien ha afirmado que ha terminado por fin con la resistencia vasca, ahora podría estar rascándome las partes en algún yate de lujo aparcado en Hawaii. Lo que pasa que aquí los que hacen negocio de ocupar a un pueblo son los que se llevan la pasta.

No ha habido un solo ministro de interior que no haya cantado victoria y lo cierto es que todos los ministros de interior han pasado a la historia y nunca se llevaron el gato al agua. Llevan literalmente decenas de miles de detenciones en las cuatro últimas décadas, supuestamente más supuestas cúpulas detenidas que las que tiene el Vaticano y más máximos dirigentes que si esto fuera México no existiría sub-comandante Marcos ya que todo el mundo sería comandante. Aunque también depende de cómo sople el viento, un día todo es ETA, al otro día nada. Ser asesor del ministro de interior es lo que tiene. Nunca dijo Goebbels que esto iba a ser fácil.

Cierto es que aquí no existe ni proceso de paz, ni de solución ni nada que se le parezca, pero tampoco existe el domuit vascones. En vez de repetir todos los años desde que la historia se pierde en los tiempos la misma cantinela qué tal autoderminación para Euskal Herria, paz y amnistía.