Nazi-banderistas intentan boicotear concentración solidaria con Novorossia en la fería de Durango

Con motivo de la Feria de Durango, Euskal Herria-Donbas Elkartasun Komitea junto con miembros de la diáspora eslava en Euskal Herria, convocó una concentración el sábado 6 de diciembre en el recinto de Landako.

Alrededor de 30 personas demostraron su solidaridad internacionalista y denunciaron el genocidio cotidiano que el gobierno golpista ucraniano está realizando contra la población civil de Novorrossia. Se expusieron duras imágenes de los crímenes de guerra ejecutados por las fuerzas gubernamentales y  por los batallones de voluntarios nazis contra los ciudadanos del Donbass, con la intención de informar y concienciar a la sociedad vasca sobre la verdadera dimensión del conflicto y hacer un llamamiento a la solidaridad con el Pueblo Trabajador de Novorossia.

No tardaron en aparecer sujetos con actitud provocativa realizando fotos de los concentrados y realizando llamadas telefónicas. Al poco rato aparecieron cuatro individuos con una clara actitud hostil y amenazante. Dichos personajes se declararon abiertamente como seguidores de Stepan Bandera, de ideologia neonazi y residentes en Bizkaia, increpando a los presentes.

Los concentrados no cayeron en las burdas provocaciones y estos elementos fueron rápidamente  alejados de la concentración e identificados.

Ante estos sucesos desde Euskal Herria-Donbas Komitea queremos hacer dos valoraciones inmediatas:

1 Constatamos la ya conocida ignorancia, arrogancia y estupidez de los elementos neonazis, que sin ningún pudor se presentan como nazis declarados pretendiendo dar lecciones en Durango, ciudad bombardeada por los fascistas en 1937, a las personas solidarias de Euskal Herria y de la diáspora eslava, personas que tienen muy viva la memoria histórica de la lucha antifascista y de los crímenes fascistas.

2 El fascismo sigue extendiéndose por Europa. Lo sucedido en Durango es otra muestra de ello y nos obliga a permanecer en una vigilancia combativa y activa. Existen elementos nazis y banderistas conviviendo entre nosotros, aquí en Euskal Herria y no podemos mirar hacia otro lado.